Durante nuestro viaje de luna de miel visitamos un par de islas asiáticas: Bali (Indonesia) y el Atolón Noonu (Maldivas).
La idea era pasar la primera semana de visitas culturales y templos en la llamada Isla de los Dioses (Bali) y otra semana descansando en la playa en las paradisíacas Islas Maldivas.
Si relacionas Bali con la idea de magníficas playas, te puedes llevar una gran decepción. Al contrario de la creencia popular, no es un destino que destaque especialmente por sus playas. A no ser que saltes a otras islas como Lombok o Gili (Trawangan, Meno y Air).
Para visitar Bali, hay un par de opciones comunes:
1) Alojarse en Ubud, un lugar increíble y céntrico, y desde ahí hacer excursiones al resto de la isla.
2) Hacer una ruta circular, y dormir cada noche en una zona (Candidasa, Lovina, Ubud, …).
Nosotros apostamos por la segunda opción, y para ello contratamos los servicios de un guía privado + conductor.
DÍA 1: DOMINGO 18 SEPTIEMBRE 2011: MADRID – BALI
Tomamos un vuelo de Qatar Airways desde Madrid (11:15) –Doha (19:10 – 01:55) – Bali (19:05 + 1) llegando al día siguiente por la tarde a la isla de Bali. Durante la escala, comprobamos el lujo que se gastan en los países del Golfo Pérsico:
DÍA 2: LUNES 19 SEPTIEMBRE 2011: BALI – CANDIDASA
Aterrizamos sobre las 19:00 en el aeropuerto de Denpasar en Bali, y allí nos estaban esperando para llevarnos al 
Hotel Rama Candidasa, una localidad situada al sureste de la isla. No os olvidéis indicar en los hoteles, si es vuestra luna de miel, para que os reciban de una forma un poco más especial, como collares de flores, bebidas de bienvenida o detalles en la habitación:
Nos fuimos pronto a descansar, para recuperarnos del larguísimo viaje. Al día siguiente empezaríamos a tope con las visitas por la isla.
DÍA 3: MARTES 20 SEPTIEMBRE 2011: CANDIDASA
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Amanecía en esta isla tan especial, y al abrir las ventanas de la habitación, nos encontrábamos con un lugar completamente diferente a lo que estábamos acostumbrados. Palmeras y verde por doquier:
Curioseamos un poco las instalaciones del hotel, que ofrece piscina y hamacas con vistas al mar de Bali (no hay playa).
Vinieron a recogernos, y el primer sitio que visitamos fue la aldea tradicional de Tenganan. Sus habitantes son de los más antiguos de la isla (Bali Aga). No sabemos si habrá cambiado desde nuestra visita (probablemente sí, por algunos comentarios que hemos leído más actuales), pero en este pueblo al contrario que en otras partes, donde los vendedores eran verdaderamente agobiantes, se respiraba pura tranquilidad:
Nos llamó la atención que tenían gallos pintados de vivos y chillones colores (rosas, amarillos, verdes), utilizados para practicar peleas de gallos:
El pueblo vive fundamentalmente de la venta de artesanías: instrumentos musicales hechos de bambú, máscaras, tejidos,… Es una isla donde destaca especialmente la habilidad artística de sus habitantes en muchas de sus facetas: pintura, música, danza, escultura:
El colegio era muy humilde, con su portería hecha de bambú, pero tenía muchísimas mejores vistas que los nuestros:
Tras pasear un rato por el pueblo, pusimos rumbo a las Piscinas Reales del 
Palacio de Tirta Gangga (07.00 – 18.00), en la provincia de Ababi:
Su nombre significa Agua del Ganges. No lo habíamos comentado, pero la religión más extendida en Bali es la hindú, y después de la India, es el país con mayor número de hindús:
El Palacio del Agua, fue construido en 1948 para el Rajá (Rey) de Karangasem. Es un bonito complejo de fuentes y piscinas decorados con estatuas y losas en el agua:
Merecen especial atención las estatuas de toros, elefantes y serpientes/dragón (nagas). Todas tienen grandes detalles, ya que como os decimos, los habitantes de la isla son unos magníficos artistas:
Es habitual ver a gente purificándose en las aguas sagradas:
Se trata de una visita diferente a la del resto de templos de la isla, así que es buena idea incluirla en tu itinerario:
Abandonamos las piscinas reales, y nos dirigimos a 
Goa Lawah (Templo de los Murciélagos). Por el camino, nos sorprendían los paisajes llenos de arrozales y verde por todos los lados:
Llegamos a Goa Lawah, un pequeño templo de más de 1000 años de antigüedad:
Si te fijas en el símbolo que aparece debajo en la siguiente foto, verás una cruz gamada, que nada tiene que ver con el nazismo, se trata de un símbolo hindú. El término esvástica proviene del sánscrito svastika, que significa buena fortuna o bienestar, y ha sido usado por muchos pueblos y culturas a lo largo de la historia:
Por cierto, no lo habíamos comentado pero para entrar a los templos es obligatorio llevar sarong, que se pone a modo de falda tanto por hombres como mujeres, y que te prestan a la entrada de los mismos:
Según la creencia, el templo está conectado con el Templo Madre Besakih, el templo más sagrado de la isla, el cual está a unos 30 km. Los habitantes de la cueva son unos simpáticos murciélagos, cuyos excrementos (guano) dejan un fuerte olor:
Hay miles de murciélagos en el interior de la cueva. Según la creencia, también hay una serpiente gigante en el interior que se alimenta de ellos. Nosotros no nos adentramos a comprobarlo:
Al salir del templo, presenciamos una ceremonia a pie de playa, con muchos cánticos y ofrendas. Verás sombrillas balinesas durante toda tu estancia en la isla y en cada uno de los templos:
Después hicimos una visita rápida al pueblo costero de Kusamba. Se trata de un pueblo de pescadores, donde olía verdaderamente fuerte:
Lo que más mereció la pena, fue ver los jukung o cadik, curiosas canoas de colores utilizadas tradicionalmente para la pesca:
Nuestra siguiente visita era ir a ver el Templo Madre Besakih, por el camino atravesamos la zona de Sidemen, una zona muy bonita, con unos paisajes repletos de arrozales:
Comimos en un restaurante llamado 
Lereng Agung. El típico sitio buffet donde llevan a comer a todos los turistas:
Sin embargo, el restaurante tenía una sorpresa, y es que había unas vistas simplemente fabulosas de los alrededores, en la zona de Rendang:
Otra sorpresa fue encontrarse con un murciélago, al más puro estilo Batman:
Después de comer, visitamos el templo principal de la isla: Pura Besakih. Antes de llegar a él hay que subir una pronunciada pendiente, donde hay algunos vendedores que te agobian un poco. También hay falsos guías que si te ven sólo te medio obligan a tener que contratarlos para entrar al templo, pero pasad olímpicamente de ellos ya que puedes entrar por libre. Nosotros como íbamos acompañados no tuvimos ese problema.
Pasamos por delante del Pura Basukian Puseh Jagat, con una bonita puerta de entrada, muy típica de los templos de Bali y conocidas como Candi Bentar:
El Templo Madre o Pura Besakih está ubicado en las laderas del sagrado Monte Agung. El horario es de 08:00 a 17:00. Es un complejo muy extenso, formado por 22 templos, aunque el principal es Pura Penataran Agung.
Hay varios patios interiores que no se pueden visitar aunque se vaya con guía, ya que son exclusivos para peregrinos, pues es el templo más sagrado de la isla y lugar de peregrinación.
Lo que más llama la atención son los merus (o pagodas) de diversas alturas. El número de pisos de los merus tiene su significado en la simbología hindú. Así, 2 pisos simbolizan lo humano, 3 la trinidad, 5 la naturaleza, 7 el mar, 9 el Volcán Batur y 11 el Volcán Agung que es el punto más alto de la isla:
Debido a la cercana presencia del Volcán Agung, hubo un susto cuando éste entró en erupción en 1963, y la lava fluyó a través del complejo, aunque milagrosamente no hubo excesivos daños. Esto se interpretó como muestra sobrenatural de los dioses, que evitaron con su intervención la destrucción completa del templo:
Asistimos a una ceremonia hindú, cuyos cánticos nos resultaron parecidos a las llamadas a la oración de los musulmanes. La parte de arriba del atavío de los hombres es blanca, mientras que las mujeres utilizan coloridos vestidos:
Algo muy característico en todos los templos que visites en Bali, es la presencia de ofrendas de todo tipo frente a altares:
No olvides subir arriba del complejo y echar la vista atrás para contemplar los merus escalonados a distintas alturas, y si puedes quedarte a contemplar un precioso atardecer:
Tras la visita al precioso complejo, y antes de volver a nuestro hotel en Candidasa, visitamos Bukit Jambul, una zona muy bonita de terrazas:
